Jean Luc
Ayoun
RAM
La
Vibración del Corazón y la Vibración de la Luz
30 octubre
2009
Soy RAM.
Recibid amadísimos humanos, mis saludos y bendiciones. Como algunos de vosotros
sabéis ya, soy el Maestro del Aire. Soy el que desde hace más de un año, os ha
comunicado cierto número de claves Vibratorias y claves de Consciencia para que
podáis acceder a la Vibración del Corazón. Quisiera, si os parece bien,
dialogar con vosotros ahora, sobre lo que es la Vibración del Corazón y la
Vibración de Luz.
El ser
humano habla mucho del Corazón. El ser humano habla mucho de Luz. Hablar del
Corazón no es el Corazón. Hablar de Luz no es la Luz. El Corazón no es una
idea. El Corazón no es un concepto. El Corazón no es un comportamiento. El
Corazón, ante todo es Vibración percibida, es Vibración sentida en el pecho. De
igual forma, la Luz puede verse, puede ser conceptualizada, la Luz puede ser
imaginada. La Luz puede verse con los ojos abiertos o los ojos cerrados y, sin
embargo eso no es la Luz. La Luz, como el Corazón, es Vibración. La Vibración
de la Luz es una Vibración que recorre el cuerpo y que amplifica los cuerpos
sutiles, desde el cuerpo etérico hasta los cuerpos más sutiles. El ser humano
está muy dotado para poner nombres a la Luz y al Corazón, pero acordaros que ni
la Luz ni el Corazón son palabras y, antes de ser modificaciones de la
Consciencia en vuestra Vida, son ante todo, Vibraciones. Hablar del Corazón sin
experimentar Vibraciones, no es el Corazón. Decir y afirmar estar en la Luz o
vivir en la Luz, sin percibir la Vibración, no es la Verdad. Si la Luz está en
vosotros, la Luz vibra. Si el Corazón está en vosotros, entonces, el Corazón
vibra. Si el Amor está en vosotros, entonces el Corazón y la Luz vibran.
Cualquier otro Amor solo es una aproximación al Amor auténtico, al Amor
Vibración. El ser humano llama Amor, atracción. El ser humano llama Amor,
deseo, emoción. El ser humano llama Amor, concepción, o incluso filosofía, o
religión. Y por lo tanto, permanece en el dominio de los conceptos, en el
dominio de las palabras y de la Ilusión. Mientras que no haya Vibración, en lo
que concierne al Corazón, el Amor y la Luz, no hay Verdad, hay Ilusión de la
Luz, Ilusión del Corazón e Ilusión del Amor.
Evidentemente,
el ser humano, entre las primeras palabras que aprende y repite, son las
palabras “te amo”. Pero frecuentemente, detrás de estas palabras hay otra cosa
y, sobre todo no hay Vibración. Sé que estáis aquí a propósito de las
Dimensiones y a propósito de la Luz. La Luz de vuestro mundo no es la Luz de la
Quinta Dimensión. La Luz de la que hablan los seres que han alcanzado o
penetrado el Despertar, no es la Luz que vosotros veis. Vivir la Luz, vivir un
estado de despertar, se acompaña de Vibraciones y se acompaña también de
modificaciones de la Consciencia habitual, hacia una Consciencia más unificada,
más sosegada y más en Vibración. Yo te amo, es la frase que después de “mamá”,
es ciertamente la más utilizada en la Humanidad, y sin embargo, estas palabras están
frecuentemente, privadas de su Vibración. A menudo estas palabras están
privadas de su Luz, y aun más a menudo, estas palabras están privadas de
Corazón. Amar es dar. Amar es darse haciendo abstracción de Sí. El ser humano
ama para sí y no para el otro, mientras que amar es entregarse al otro y no
darse a Sí. Volvamos a la noción de Vibración. La Vibración es algo que se
percibe como un movimiento más o menos regular, o más o menos rápido y por
tanto, una amplitud y una frecuencia que le es propia. La Vibración puede ser calmada.
En ese momento, no la percibís. Se hace perceptible cuando se modifica, cuando
se amplifica o se ralentiza en relación a vuestro estado tranquilo o normal.
Percibir, captar la Vibración es por tanto, una modificación de la Consciencia
Vibral, calmada o normal. Esta Vibración puede amplificarse o disminuir,
ralentizarse o acelerarse, localizarse en un punto o una zona, o estar difusa
en todo el cuerpo. Entonces, la cuestión primordial que se os debe plantear en
vuestro camino evolutivo, particularmente en estos tiempos y en estos momentos,
es la capacidad de vuestro cuerpo para percibir la variación de la amplitud y
la variación de frecuencia de la Vibración. ¿Cuál es el movimiento generado en
vosotros, de manera general, o de manera local? La Vibración que se amplifica y
por tanto se acelera la frecuencia, participa innegablemente de la ampliación
de vuestra Consciencia. Solo la Luz, solo el Amor es capaz de desencadenar
esto. Evidentemente, en la descripción que os he hecho, no hablamos de
máquinas, no hablamos de tecnología sino de la Vibración emitida por una
Consciencia, sea de este plano o de otros planos. Si la Vibración se hace más
lenta, si la amplitud disminuye, si la frecuencia se ralentiza, entonces la
Consciencia que emite esta Vibración no participa de la Luz y del Amor.
Ahora, os he
dicho que la Luz Vibral de vuestra dimensión solo es el pálido reflejo de la
Luz Vibral de la quinta dimensión. La Luz es, ante todo Vibración. Cuando la
Luz se conjuga con el Amor, se convierte en Fuego. Fuego del Amor, Fuego que
crepita, en sentido propio como figurado, en vuestras lámparas, en vuestros chakras,
pero también a escala del cuerpo. En todas las tradiciones, y no solamente en
la mía, los seres que han vivido y realizado el despertar de la transcendencia,
todos, sin excepción, han descrito los mismos procesos. No hablo solo de los
movimientos de la Consciencia y de la energía en el canal medio de la columna
vertebral, llamado Sushumna, no hablo solo del descenso a las lámparas o
chakras, de la Shakti o Espíritu Santo. Hablo de un proceso mucho más general
que vosotros estáis llamados a vivir hoy, si lo aceptáis. La Vibración es la
garantía de la autenticidad de la Luz y de la autenticidad del Amor. El Amor
sin Vibración no es Amor. La Luz sin Vibración no es la Luz. El Amor es la Luz.
Sin Fuego del Amor, no está la Luz y la Vibración. El lenguaje del humano está
llamado a cambiar. Vuestro lenguaje está hecho de palabras, de Vibraciones
sonoras. Debe pasar a la Vibración de la Consciencia, reemplazar el lenguaje
por el Verbo. El Verbo es el agente Creador, el Verbo es Vibración, no
solamente Vibración sonora, sino Vibración de la Consciencia. El Amor y la Luz
verdaderos participan de la Consciencia y por tanto, de la Vibración. El
lenguaje de las Vibraciones es un lenguaje cuyo aprendizaje es fácil, la
calidad y cantidad de la Vibración, determinan y condicionan la realidad y la
Verdad de lo que percibís en Amor y en Luz. El trabajo de la Vibración y la
percepción de la Vibración, es la única prueba y la única garantía de la
autenticidad de lo que vivís, o de lo que viviréis.
Más allá de
vuestra reunión aquí, en este lugar, la Tierra, el Sistema Solar, está sometido
a Vibraciones nuevas, Vibraciones destinadas a elevar en vosotros, el corazón y
la Luz. Esta Vibración ante todo, debe
hacer resonar vuestra Consciencia para abrirla y permitir captar y resonar, con
el fluido de las Vibraciones que vienen de otra parte, fuera de vuestro Sistema
Solar. Este aflujo de Vibraciones está destinado a permitiros, si lo deseáis,
vivir otra octava de la Creación. Y vivir otra octava de la Creación, no es una
elección deliberada sino una elección de la Vibración de vuestra Consciencia.
Solo la Consciencia que supera la esfera de la personalidad, solo la
Consciencia que tiene acceso a la Radiación de la Presencia, a la Radiación del
“yo soy el que soy”, es capaz de despertaros a esta Vibración. La Vibración que
viene, es Amor y Luz. Es Amor y Luz porque cuando la captáis, cuando resonáis
con ella, sois capaces de percibir la rapidez y amplitud que recorre vuestras
lámparas y vuestro cuerpo. Esta Vibración nueva, está destinada a despertaros.
El despertar se realiza por la Vibración. El despertar se realiza por la
captación de vuestra Consciencia que se abre a esta Vibración. Las palabras
pueden equivocar. Los humanos pueden equivocarse. Esto forma parte, tal como lo
decís, de la experiencia. Pero la Vibración no se puede equivocar. Ella es
frecuencia, es intensidad, capaz o no, según vuestra proximidad Vibratoria, de
hacer resonar en vosotros, las puertas adecuadas. Además del sonido, existen
las Vibraciones portadas por un lenguaje Vibratorio que no es un lenguaje de
palabras, sino un lenguaje silábico, lenguaje de Vibraciones, las Vibraciones
que han precedido e inducido la Creación. No hablo de la Creación de esta
Dimensión sino de la Creación de la totalidad de las Dimensiones que se ha
podido hacer según una arquitectura precisa, con una ordenación precisa de la
Vibración Madre. Vibraciones silábicas que se os han remitido, hace algunos
meses, las primeras de ellas. No volveré sobre esto.
Insisto de
forma efectiva y contundente, sobre esta noción fundamental: no puede haber
Alegría si no tenéis esta Vibración. No puede haber Unidad si no descubrís esta
Vibración. La Vibración de la que hablo, es la conjugación del Corazón y de la
Luz o del Amor y la Luz, por su poder Vibratorio. La conjunción de los dos se
llama el Fuego del Amor. El Fuego del Amor es una Vibración que nace, en
general, en la parte alta del cuerpo a nivel de la cabeza o a nivel del
Corazón. Las dos coronas radiantes del Corazón y de la cabeza, se reúnen entonces
en un abrazo de dos círculos, de dos coronas, formando el símbolo del infinito
y se desposan. La Vibración se percibe y es percibida a nivel del Corazón y de
la cabeza. Es esa Vibración que lleva vuestra Consciencia a expandirse y a
alcanzar las esferas de lo indecible que, en la tradición, nosotros hemos
llamado Samadhi. El Samadhi es simplemente, la reconexión de la Vibración del
Fuego del Amor en el Corazón y en la cabeza. Existen siete octavas diferentes,
a veces sucesivas y a veces no. Entonces, estáis aquí para aprender y vivir
sobre todo, el lenguaje de la Vibración. La Vibración llamada “Fuego del Amor”
es la que está más próxima a vuestra Esencia, vuestra dimensión estelar o de
vuestra dimensión de Luz auténtica. Vosotros, por medio de vuestra Consciencia
y por medio de la Vibración de cristal y de las sílabas sagradas, vais a
penetrar el lenguaje vibratorio del Fuego del Amor.
Lo he dicho,
hace ahora un año de vuestro tiempo terrestre: solo hay una puerta de salida de
esta Ilusión y esa puerta es el Corazón. No el Corazón chantaje, no el Corazón
palabras, no el Corazón idea o abstracción, sino el Corazón Vibración. No hay
otras posibilidades que ésta. Otros humanos han vivido cierto número de etapas
(desde hace muchos años, muy anteriores a la intervención de los Arcángeles) en
relación con la activación, por toques sucesivos y por corrientes sucesivas, en
la Humanidad y en la Consciencia, Vibraciones cada vez más altas y cada vez más
penetrantes, en vuestros cuerpos y vuestras Consciencias. Esa pulsación, hoy es
llevada al máximo por el trabajo de la Humanidad, por el trabajo de grandes
entidades de Luz, pero también porque la Tierra y el sistema solar tenían una
cita particular con la Luz, con la Vibración, con el Corazón, con el Amor y por
tanto con la Luz auténtica. Es esto lo que os ha preparado, a la Tierra y a
todas las Consciencias, a vivir lo que viene. El Fuego del Amor es un Fuego
devorador, pero que no quema. El fuego del Amor es una Vibración que se
extiende de manera muy rápida a partir del Corazón, o la cabeza, o ambos, a la
totalidad del cuerpo y que, sobre todo, se acompaña de un sentimiento
particular que está más allá de un sentimiento humano normal, de un estado
particular en relación con el Ser, con la Presencia, consigo mismo y que es
Alegría. La Alegría es Vibración y expansión. Igual que el Corazón es la puerta
de salida, la Alegría es el motor. No podéis salir de la Ilusión sin vivir la
Alegría. Mirad las experiencias vividas por las Consciencias humanas encarnadas
en todas las tradiciones, de todas las religiones. Algunas almas se han
consumido en el Amor, por la Alegría. La Alegría de la que hablo, por supuesto
no es el placer. La Alegría de la que hablo no puede ser satisfecha porque no
es una búsqueda, es un estado. El trabajo vibratorio es el único que no puede
induciros a error.
Acordaros
sin embargo, que la Vibración de la Luz, en esta Dimensión, no es la Vibración
de la Luz de quinta Dimensión. La Vibración en vuestra tercera dimensión es
calor. Vosotros lo llamáis magnetismo o electromagnetismo. La Vibración de la
quinta Dimensión, la Vibración de la Luz de quinta Dimensión, para ser más
preciso, es Fuego del amor y, paradójicamente, no es calor sino picaduras y
Vibraciones, es expansión, es amplificación de la Vibración. La Vibración, lo
habéis entendido, es el motor, pero también el elemento que os va a permitir,
más allá de vuestras concepciones, de vuestras ideas, más allá de vuestra
comprensión incluso, percibir y saber si la Vibración es Amor, Luz, Corazón, o
si no lo es. Y en vosotros, tenéis la capacidad innata de percibir por la
Vibración, lo que es justo y lo que es falso, cosa que no podréis hacer jamás,
observando o escuchando palabras o un rostro. El aprendizaje del lenguaje
vibratorio hoy, es esencial. Conocer la Vibración y sus manifestaciones os da
acceso a la certeza, a la evidencia de lo que es percibido y de lo que es
sentido. El acercamiento a la Vibración se puede hacer, tal como ha dado (Ndr:
en la rúbrica “protocolo” de nuestro sitio), por la meditación sobre el Corazón
pero puede realizarse también, por el acercamiento Vibral directo a esta ola de
Luz que viene hacia vosotros.
Algunos
pueden decir ¿cómo captarla? ¿Cómo vivirla? ¿Cómo sentirla? Y bien, primero de
todo, aprendiendo a escuchar la Vibración, de igual forma que aprendéis a
escuchar, siendo niño, al que os habla. De igual forma, debéis escuchar la
Vibración. La escucha de la Vibración solo se hará a partir del momento en que
la mente ha hecho silencio, sobre otros polos de actividades de vuestras Vidas,
a partir del momento en que estéis realmente a la escucha, con la única
diferencia que esta escucha, no se hace por la oreja o con los ojos, sino en el
reposo e inmovilidad del Corazón y en la noción importante, de acogimiento de
la Vibración para desembocar, en un segundo tiempo, al abandono a la Vibración.
Muchos seres de Luz os han dicho que la Luz era Inteligente. Lo es,
seguramente, mucho más de lo que será jamás un cerebro humano. La Inteligencia
de la Luz Vibral es evidencia porque sabe dónde está el bien, sabe dónde está
la Unidad. Por eso el ser humano debe enchufarse, ponerse a la escucha de la
Vibración. Esta es una etapa mayor en la evolución de vuestra Consciencia, hoy,
en este mundo terrestre. La Luz es Inteligente y la Vibración tanto más, puesto
que la acompaña. Es incluso el soporte. La Inteligencia de la Vibración puede
transmutar en la Consciencia humana, muchas cosas. Si miráis la Vida de algunos
místicos que han encontrado esta Vibración, os daréis cuenta de que las necesidades
fisiológicas cambian. La Alegría al instalarse, aleja con toda seguridad, del
ser que vive esta Alegría, el sufrimiento, aleja el sufrimiento porque en la
Vibración no hay sitio para el sufrimiento, ni siquiera para la enfermedad. La
Vibración es sanación total. La Vibración es lo que se debe establecer en
vosotros, por eso no hay técnica complicada, la que os he dado hace un año (Ndr:
“meditación sobre el corazón”, en la rúbrica “protocolo” de nuestro sitio) era
muy sencilla y ha propiciado efectos para muchos seres humanos.
Hoy es
todavía más sencillo, porque la intensidad de la Luz es más importante que
nunca. Y la Luz os pide simplemente que la acojáis que os abandonéis a ella,
para dejarla obrar y dejarla transformaros. Entonces, es más fácil para el ser
humano realizar este abandono, este acogimiento de la Luz Vibral, por la
práctica de ejercicios. No creáis por eso que los ejercicios sean
indispensables, pero lo son de una manera particular, para vuestra mente. Hay
literalmente un re-encaminamiento de la Vibración para permitirle evitar la
mente, pasando por la Vibración silábica, pasando por los cristales, o pasando
por lo que llamaríais “trabajos energéticos” de preparación a la Vibración.
Esto es lo que realizaréis. Lo que quiere decir también, que hoy, para el ser
humano que quiere encontrar la salida
¿qué es la salida? La salida no es en absoluto, el fin. La salida es quizá un
fin, el de las ilusiones. La entrada en Eternidad, en Êtreté, solo se puede
hacer a este precio. La pérdida de vuestras referencias habituales no es una
pérdida definitiva sino la transcendencia de esas referencias. El ojo de la
Consciencia que se abre a la Vibración, desemboca en la Alegría y en la comprensión
de lo que muchos intervinientes han llamado “la falsificación de este mundo” y
su Ilusión. Muchos modelos tradicionales os han dicho que este mundo era Maya,
Ilusión. Pero, evidentemente cuando el cuerpo sufre, es difícil decirle que
solo es una Ilusión, cuando los problemas se acumulan, difícil decirse que son una
Ilusión. No podréis convencer jamás, a
vuestra mente de que esto es solo una Ilusión, porque para ella es la única
realidad y la única Verdad. Solo existe para sostener esto y, fuera de esto, no
existe, simplemente.
Entonces, la
evolución de vuestra Consciencia en la Luz Vibral, en la Luz y la Vibración del
Amor, viene acompañada de la muerte de la mente. La muerte de la mente no
necesita un entierro, ni desaparición. La muerte de la mente es simplemente que
la Consciencia que ha descubierto la Vibración, va de ahora en adelante, a
controlar, no en el sentido de un control sino más bien en el sentido de una
envoltura, de una imbricación: la Consciencia se va a superponer a vuestra
mente, no podrá ya ser vuestro maestro, sino que estará a vuestro Servicio. Hay
por tanto, una reversión y un balanceo de las funciones. Lo más frecuente, en
la Vida del ser humano, es que la mente decida y os haga creer que es vuestra
Consciencia, y vosotros la creéis. Pero el día en que descubráis la Consciencia
Vibral, la mente no puede mentiros más. Está superpuesta y revestida por la
Consciencia despierta. La Consciencia despierta es la única que ha aceptado
acoger la Vibración de la Luz que se ha abandonado, que se ha sumergido y ha
vuelto a surgir renovada. Hoy, vosotros penetráis mundos de Vibraciones cada
vez más rápidas, que vienen acompañados por una aceleración en vuestros modelos
de Vida, pero también en modelos de Vida de la Humanidad en su conjunto.
Vosotros estáis, en ese periodo que muchos textos han llamado “tiempos
reducidos” porque se deberían desarrollar muchos fenómenos, pero también porque
la Consciencia debería desplazarse de manera ampliada, elástica y extensible.
En este periodo, las puertas se abren, muchas revelaciones tienen lugar. Muchas
cosas se desvelan y os piden avanzar, cambiar, hacer morir o dejar morir lo que
debe morir, lo que os ataba, lo que os impedía ser libre, ser soberano. Todo lo
que os controlaba os hace ahogaros. Comprendéis que con la Luz y la expansión
de la Consciencia no hay nada de incontrolado. Solo hay que dejar hacer, sin
por eso, estar inactivo porque dejar hacer demanda en Sí, un trabajo sobre Sí,
de abandono a la acción de la Luz. Ahora habéis llegado a esa etapa. Cada uno
lo vais a vivir a vuestro ritmo, en función de vuestras predisposiciones a
aceptarlo, en función de vuestras capacidades para elevar vuestras Vibraciones.
No puede haber derogación o suspensión. Tal como se os ha dicho, el reloj
cósmico es muy preciso. Corresponde a movimientos, cierto, con ajustes,
movimientos de mecánica celestial concretos donde las galaxias, los mundos y
las dimensiones, interfieren entre ellos, vosotros también debéis interferir y
ajustaros a la ola de la Luz, a la ola del Amor. El órgano de ajuste es el
Corazón: vuestra capacidad de amar sin palabras pero en vibración, vuestra
capacidad de entrar en resonancia con las otras Consciencias presentes en esta
Tierra. No solo los hombres sino, la naturaleza y los otros reinos.
¿Cómo daros
cuenta, además de la percepción de la Vibración, que estáis en el buen camino?
Os basta simplemente, mirar los momentos que pasáis en vuestra jornada,
sintiéndoos liberados, sintiéndoos en Alegría. Y, si miráis vuestros días
pasados, si esta proporción de Alegría, si esta proporción de liberación no
aumenta, entonces volvéis la espalda a la Luz. La Vibración de la Luz es
liberación, la Vibración del Amor está ligada al hecho de retirar todas las
ataduras, todos los lazos. Es importante comprender y aceptar que, si surge un
miedo, os contrae y no puede venir de la Vibración de la Luz. La contracción es
lo opuesto de la Alegría. La Alegría es dilatación, la Alegría es liberación.
Cuando planteáis los actos, sean los que sean, cuando afirmáis vuestra
soberanía, cuando decidís dejar tal cosa, tal ser, tal región o tal situación,
esto debe poneros en Alegría, no en satisfacción de un deseo cualquiera sino,
mucho más, en un estado de liberación y de apertura. La Alegría es hoy, algo
que está a vuestro alcance. La Alegría de la que os hablo no es una Alegría
consecutiva a una recompensa, es consecutiva a vuestra liberación. No porque
dejéis tal o tal cosa, estáis en Alegría sino porque os liberáis de vuestras
cadenas. Si fuerais capaces de tomaros el tiempo necesario para dejar y
abandonar vuestros fardos, mirarlos por lo que son: pesos que impiden vuestra
ligereza, entonces aceptaríais mucho más fácilmente, deshaceros de esos fardos.
La ligereza es lo que permite la Alegría. Cada vez más seres humanos están
llamados a vivir y a vibrar esta Alegría. A partir del momento en que ésta se
anima en vosotros, os es más y más fácil percibir lo que va en el sentido de la
Vibración (y que por tanto, os aligera)
lo que va en el sentido de la ausencia de Vibración (y por tanto os
densifica).
El movimiento
de liberación concierne a todas las Consciencias y a todo este sistema solar.
Necesitáis ir en el sentido de la liberación. Evidentemente la mente objetará;
que estáis obligados a prever, que estáis obligados a planificar, que estáis
obligados a pensar en mañana, pero todo eso os aleja del instante, todo eso os
aleja del aquí y ahora, de la decisión justa: esa que os aligera, esa que os
eleva. La Vibración es ciertamente, el elemento motor que os debe permitir ir
hacia la Alegría. Sin Vibración no hay Alegría. Si la Vibración aparece, hay
Alegría, sean las que sean las circunstancias externas de vuestra Vida. Podéis
haber vivido un drama familiar y experimentar sin embargo, esa Alegría.
Entonces, esa Alegría llegará a borrar la pesadez y la tristeza, ligadas a la
pérdida. Vibrar y entrar en Vibración es escapar a los condicionamientos, es
escapar a la mente y a esas trampas, es entrar en libertad, es entrar en
liberación. Hoy, la Luz os llama a esta liberación. ¿Queréis responder o
queréis persistir en la pesadez? No hay, y cada vez menos habrá, medias tintas.
La vía del equilibrio se encontrará después de la ruptura de un equilibrio que
habéis tenido, cada uno a vuestra manera, en vuestra Vida. El nuevo equilibrio
no está en función de las acciones/reacciones, de las consecuencias de la
encarnación sino más bien, un equilibrio en relación con un estado muy
particular. Ese estado particular ha sido desarrollado por los Arcángeles y
corresponde a lo que algunos de vosotros comenzáis a vivir y a experimentar: la
diferencia entre la personalidad y el Êtreté, la diferencia entre la Ilusión y
la Verdad, la diferencia entre la pesadez y la ligereza, la diferencia entre la
Alegría y el peso. Pero vosotros debéis elegir. La Vibración viene a vosotros
para haceros resonar y activar en vosotros, la Verdad de la Alegría.
He aquí, por
mis palabras, pero también por la Vibración, lo que tenía ganas de deciros como
preámbulo a lo que se anuncia para vosotros, de manera particular, en este
espacio. Evidentemente, toda la Humanidad se apresta a vivir esto, algunos sin
preparación alguna. La irrupción de la Luz en vuestra densidad será un Fuego de
artificio y un abrazo. Para otros será, sea desagradable, sea inexistente por
no experimentado. No tenéis que ataros al otro. La mejor forma de hacer adherir
no es convencer, sino manifestar la Verdad por la Vibración. Estando en vuestro
camino, estando en resonancia con la Luz Vibral, os convertiréis en los
testimonios de la Luz, os haréis los Enjambradores de la Luz, los Ancladores de
la Luz. Esto excede las palabras, excede la explicación: solo hay que Ser e
irradiar. Comprended bien que la época que vivís, es una Gracia infinita.
Amadísimos, si tenéis cuestiones en relación a este proceso, quisiera intentar
aportar una aclaración suplementaria.
Pregunta: ¿qué significa sentir el corazón como arder,
al cruzarse una persona?
El corazón
que arde es la premisa de la activación del Corazón. Se trata de un Fuego
devorador. El Fuego del Amor es la quemadura del Corazón, esa que es aportada
por los Ángeles Ardientes, llamados Serafines, Querubines, a veces por Miguel,
pero también, simplemente por otro ser humano.
Pregunta: si parar la mente es previo a la apertura
del Corazón o a la Vibración y, si la Vibración puede frenar la mente ¿cómo se
articulan los dos?
El ser humano
debe aprender a limitar la mente para que la irrupción de la Luz en vuestra
Esencia aparezca. Hay casos también, en que el otro sentido es posible, no hay
regla absoluta. Hoy, todo experiencia que facilita la irrupción de la Luz, pasa
por el protocolo que os he dado (Ndr: “meditación sobre el corazón” en la
rúbrica “protocolo” de nuestro sitio), o pasa por un reencuentro humano o un
reencuentro espiritual. Hay conjugación y ampliación de los fenómenos de
Vibración, haciendo posible la activación del Fuego del Corazón, de diferentes
formas. No hay regla absoluta, todo es posible. Lo importante es comprender que
la Vibración que recorre el Corazón como un Fuego devorador es la ilustración
perfecta de la activación de la Consciencia Vibral.
Pregunta: ¿en el acceso al cuerpo de Êtreté, la mente
tendrá todavía un rol de transmisión del supra-mental?
Si he
entendido bien lo que pregunta, la respuesta es no. La mente podrá ampararse en
la experiencia para tratar de retranscribirla, pero eso no será la experiencia.
La experiencia está asociada a la Vibración y no a las palabras. Ciertamente,
las palabras son portadoras de una Vibración, pero no es la Vibración de la que
hablo.
Pregunta: ¿se puede acceder también a la Vibración en
el diálogo con el Corazón, con un animal o una planta?
Sí, de
manera indiscutible.
Pregunta: ¿es normal estar como “oprimido” por la
energía?
El reajuste
entre la Vibración de la personalidad y la Vibración del Êtreté está más
presente que antes, a causa de la casi desaparición de lo que se ha llamado
franja de interferencia, o franja astral, por la influencia de las radiaciones
cósmicas, la Vibración del Êtreté, se ha acercado a la Vibración de la
personalidad. Esto pueden vivirlo algunas Consciencias, como un sentimiento de
flotar o de encontrarse realmente entre dos mundos, entre el despertar y el
sueño por ejemplo, o entre el sueño y el despertar. La Vibración de la
Presencia que desciende hacia vosotros ocasiona esto, sin aprehensión. A
menudo, en un estado como de separación con respecto a lo que se vive. Esto
participa de una manera innegable, en la realización del Êtreté en vosotros y
de la Presencia. La Vibración y la Radiación cósmicas que vosotros percibís y
sentís en la Tierra pueden manifestarse en periodos de reajustes, a veces importantes,
dando efectivamente como una impresión de fatiga o de pesadez, ligada
evidentemente, al efecto de la Vibración. Pero la que percibe esto es la
Consciencia de la personalidad. La
Consciencia del Êtreté se revela en el momento oportuno en ciertos
seres, a partir del instante en que la Consciencia de la personalidad no puede
luchar más, contra la influencia de la Vibración de la Luz. Entonces, algunos
seres viven reajustes importantes, dando, dentro de una misma jornada, la
impresión a veces, de estar desconectados o de estar en un más allá mal
definido. O si no, pueden sobrevenir, al contrario, fases de exaltación intensa
en relación con la penetración del Fuego del Amor. Cada Consciencia reacciona y
vive de forma diferente el proceso, cada ruta es diferente y cada uno de
vosotros estáis en una etapa diferente en esta ruta. Lo importante, incluso en
ese estado particular de pesadez, es sentir la ligereza. Hay evidencias a pesar
de la fluctuación de la Consciencia. Tocando una vez la Vibración de la Alegría
y de la Luz auténtica, esto puede bastar para desencadenar transformaciones saludables,
cambios saludables. Lo importante es ese impulso inicial. Hay que dejar después,
a la Inteligencia de la Luz actuar e interactuar en vosotros. Hay que dejar el
tiempo para que se instale, para que tome su lugar y se despliegue. Una vez
más, cada uno a su ritmo es lo importante, se viva lo que se viva en el cuerpo
y a nivel de la Consciencia, lo que en definitiva, si lo miráis hoy, de todas
formas es mucho mejor que ayer. Esto forma parte de los ajustes a la Luz y de
los reajustes entre la personalidad y el Êtreté. A partir del momento en que
comenzáis a abandonaros a la Inteligencia de la Luz, las Sombras presentes en
la personalidad se evacúan, tanto a nivel de la esfera psicológica como de la
esfera fisiológica. La Vibración de la Luz os anima a ir hacia una
transformación esencial, hacia una ligereza de vuestros pesos y cargas.
Evidentemente, esto no se hace en un día, sino que procede por pequeños toques
sucesivos, hasta el día en que sobreviene el abrazo de la Vibración, el Fuego
del Amor. En ese momento, vuestra Vida y vuestra Consciencia habrán basculado
definitivamente. No habrá ya un retorno atrás posible. Nunca más.
Pregunta: ¿por qué lo que se siente, en la Alegría o
en el malestar, está amplificado?
La Luz
Vibral que viene a vosotros es expansión. Esta expansión es magnificación de la
sensibilidad. Es como si lo que era pesado y oculto, se revelara. Entonces sí,
todo está amplificado en un sentido como en el otro. Todo depende del sentido
de reacción. Es lo que observáis vosotros mismos en los juegos de la
Consciencia de la Humanidad entera, en este momento. Las cosas pueden ir muy
rápido, los pequeños toques se han sucedido y se siente bien que la Humanidad,
en su totalidad, puede ir en un sentido u otro, y muy rápidamente. Pero los dos
sentidos, aunque sean lo más opuestos posible, conducirán ineludiblemente a la
instauración de una nueva dimensión y a la instauración de un nuevo estado de
Consciencia y de Vida. Tenéis, simplemente que acoger, repito, ser bañados lo
más libremente posible, en esta ola de Radiación. En ese momento, descubriréis
de forma muy rápida, que la naturaleza esencial y fundamental de vuestra
dimensión de Semilla de estrella, en esta personalidad, es la expresión de la
Alegría y que no puede ser de otra forma.
No tenemos más cuestiones, os damos las gracias.
Entonces
amadísimos, Maestros de la Luz, os propongo un instante de comunicación
Vibratoria. Esto me permitirá aportaros mis bendiciones y desearos lo mejor. Os
bendigo. Comulguemos.
Canalización Jean-Luc Ayoun
Transcripción : Veronique Loriot