Jean
Luc Ayoun
INTRA TIERRA
23 de Mayo 2008
Claves Ascensionales
Me presento a ustedes, hermanos
de superficie, con paz, con amor, con fraternidad. Mi nombre es irrelevante.
Sepan simplemente que mi espacio vital se sitúa debajo de vuestros pies, en el
interior de este planeta que es también el nuestro. Ustedes son hermanos de
superficie y hermanos del exterior. Nosotros somos vuestros hermanos del
interior. No me expreso por mí mismo, vengo a transmitirles. Soy por lo tanto
el portavoz del Consejo, llamado en vuestro mundo de superficie y en otros
tiempos, los veinticuatro Ancianos. Les basta saber que soy uno de los
gobernadores del pueblo de la intra-Tierra, que evolucionamos desde hace más de
trescientos mil años en el interior del manto de la Tierra, en la vida real, en
un papel esencial como guardianes, asegurando, vuestra evolución. En mi caso yo
no pertenezco a la raza humana y sin embargo soy vuestro hermano en
manifestación. Existe en efecto, desde hace mucho tiempo al presente, en
vuestro mundo de superficie, un proceso conocido llamado elevación, ascensión,
cambio dimensional. Me pidieron darles hoy, la siguiente información: les
corresponderá hacer llegar al mayor número de personas, ya que ella no choca
con ninguna sensibilidad religiosa, confesional o creencia. Esta información es
adaptable y adoptable por todos los seres humanos de buena voluntad deseando
mantener la integridad de sus campos energéticos y dispuestos a participar en
el esfuerzo de poner a este planeta en la Luz, para permitir a la vida
expandirse, a la Luz manifestarse y a ésta, concretizarse. Ustedes son, como lo
saben, o quizás no, los Hijos del Cielos y de la Tierra. Ustedes participan en
un proyecto venido del cielo a encarnarse en esta Tierra, tomando su apoyo y
volviendo hacia el cielo.
No me corresponde, en este
espacio, proporcionarles las claves cristalinas personales, sino de
comunicarles el proceso accesible a todos los seres humanos, lo repito; a
todo ser humano sin distinción de nivel evolutivo, sin distinción de edad o
país, de poder conectarse durante este tiempo, de manera fuerte, solida y definitiva,
a vuestro origen y destino de alma. Para esto, dos actos son necesarios. Lo
primero es consagrar unos minutos de vuestro tiempo para conectarse al Cielo y
la Tierra con una técnica que les es conocida: el simple hecho de afirmar
vuestra conexión bastará para generarla en las áreas particulares en las que
todos vivimos. Otro medio consiste, en colocar a nivel del pubis y
conjuntamente en la parte superior de la cabeza (y pasar media hora de vuestro
tiempo en posición horizontal), las piedras precisas, adaptables a cualquier
ser humano: colocar un cristal Merkaba en los dos lugares ya citados. Como
mínimo, pueden colocar dos cristales con su forma natural, sin importar
de donde provenga, cualquiera que sea el origen del cristal (de roca), a
condición de que esté intacto, no pulido, sin cortar, ni tallar. Colocados en
los dos lugares indicados anteriormente: el pubis y la cima del cráneo. Al
hacer esto con regularidad, asegurarán una conexión con vuestra Esencia intima,
más allá de eso, ustedes se convierten en un canal de la Luz permitiendo el
establecimiento y la facilitación de un evento mayor para esta humanidad,
debiendo sobrevenir en tiempos extremadamente reducidos.
Ayudarán de esta manera,
más fácilmente, con más fluidez, al establecimiento de la nueva dimensión y el
proceso ascensional planetario. Se les pide eso, encarecidamente por todos los
medios, a vuestra conveniencia, así como por nuestro lado, también aseguramos,
a través de otras vías, la difusión de esta información esencial a vuestra
Fuente y a vuestro origen. A través del cristal, a través de la conciencia, a
través de la naturaleza, también, se le insta a recordar que son hijos del
Cielo y de la Tierra, que participan en un proceso evolutivo mucho más
importante que vuestro camino personal y encarnaciones personales, con sus
alegrías y sus sinsabores. Este mensaje es un mensaje solemne. Yo sólo soy el
portavoz del colectivo vibratorio más evolucionado, del grupo de dimensiones y
de mundos. Ustedes se encuentran en los albores de un nuevo día. La noche acaba
de comenzar. El amanecer de este nuevo día está al alcance de la mano y de la
conciencia. La duración de la noche sólo depende de vuestra voluntad a través
de esta simple conexión, a través de la simple reminiscencia de vuestro origen.
A través de esta conexión energética y de conciencia afirman por la misma,
vuestra afiliación, y sobre todo se convierten, una vez más, en canal
privilegiado de la nueva energía y de la nueva conciencia. Ayudarán con eso,
mejor que en cualquier otra forma, a todos los hermanos de la superficie
del mundo a entrar a su turno, en esta conexión. Esto es muy simple. Esto puede
parecer simplista, ridículo, pero cuando ustedes hayan experimentado este
proceso, algunos se darán cuenta de inmediato, del poder de la Luz que es
vuestra y del poder de la Luz del Cielo y de la Tierra.
Hermanos y Hermanas de
superficie, les doy mi bendición, y todo mi amor. Voy a retirarme ahora y les
dejo continuar con el propósito de vuestra presencia aquí. Pero no olviden el
objetico de vuestra presencia aquí, tan corta que es de irradiar la Fuente,
irradiar la indecible Luz que Son. No se dejen abusar por las vestiduras de la
personalidad, por las vestimentas de la sociabilidad, por las vestiduras de las
convenciones y por las fuerzas que querrían impedir la aparición de lo que
viene. Lo que viene, está ahí, golpea a la puerta y pide entrar. Paz a
ustedes, paz a vuestra alma, paz a vuestro destino. Sean benditos. Les
transmito la Gracia del Consejo.
Traducción: Hedyn Núñez
http://mensajes-del-espiritu-2010.blogspot.com