Jean
Luc Ayoun
MARIA
2 septiembre 2005
Yo soy María,
Reina de los Cielos y de la Tierra. Bienvenida a vosotros queridos niños. Yo os
saludo, os aporto mi bendición. Y primero de todo, si me lo permitís, voy a
responder a esas cuestiones y preguntas antes de daros algunas informaciones de
orden general y terminar este trabajo
tan querido a mi corazón, de apertura de vuestros corazones y de comunión con
mi corazón.
Pregunta:
¿cómo saber lo que conviene abandonar para encontrar la “rectitud”?
Debes
abandonar todo lo que te lleva a la confusión. Debes abandonar todo lo que te lleva
a la duda. Solo debe permanecer, solo debe amplificarse a acción recta. La acción
recta definida como la que te permite
centrarte en tu corazón, la que te permite acercarte a ese estado de Unidad,
ese estado de alineamiento, y ese estado en que no hay lugar para la duda, y
ese estado en que el trabajo bien hecho a nivel de la consciencia es una
certeza. La voluntad de Bien que te anima no debe dejarse perturbar por las
técnicas o medios contrarios a esta voluntad de Bien. Pero la voluntad de Bien
no debe ignorar que hay elementos que a veces, incluso si se asemejan a las
cosas que pueden ir en el sentido de la Divinidad, no van en el sentido de la
Divinidad sino en el sentido de la división. Es esencial que tú misma hagas las
elecciones que son necesarias a tu rectitud. La mejor prueba de la rectitud
está en la unicidad, en la fluidez de la Unidad y comprender que a partir del
momento en que el trabajo está bien hecho hay pacificación del corazón,
pacificación de las emociones y sentimiento de rectitud en la conciencia. Ahí
se sitúan tus elecciones entre lo que debes abandonar y lo que debes
privilegiar. He dicho.
Pregunta:
¿podría hablarnos de una herramienta que se llama “constelaciones familiares”?
A partir del
momento en que, en un trabajo, el que sea, incluso si no es un trabajo sino una
simple conversación, hacéis resurgir una emoción que pertenece necesariamente
al pasado, tenéis el resurgir de ese pasado en la estructura viviente. Este
resurgir del pasado, que ya estaba cristalizado de alguna forma, se moviliza,
se expande en la conciencia para hacer una toma de conciencia total, aunque no sea
el caso. El único problema inherente en esta clase de trabajo es que la
cristalización que se des-cristaliza más tarde, se vuelve a recristalizar
todavía más profundamente y vuelve a descender.
Hay un error
fundamental en todas las corrientes psicológicas desde hace cien años en este
buen planeta, que es creer que es suficiente llevar un suceso del pasado a la
conciencia para transcenderlo. Ahora, es necesario eliminar el problema. La
única cosa que debéis a llevar a la memoria es el recuerdo de vuestra Divinidad
y el recuerdo de vuestra chispa primordial y de la Fuente que sois y del Amor
que sois. Cualquier camino que lleve a la conciencia, otra cosa que la consciencia
del Amor que vosotros sois, es una herejía en el sentido espiritual. La única
cosa que pertenece al pasado que debe manifestarse en vuestro presente, es
vuestra esencia original Divina, la realidad de lo que sois. Porque vosotros
sois Amor desde la eternidad, no dudéis en absoluto, y todo lo que os lleve a
recordar, a devolver a vuestra conciencia lo que no sea esta autenticidad del
Amor que sois, es un error.
Ahora, es
evidente que podemos concebir que algunos seres están tan rigidizados, tan
solidificados en su pasado que efectivamente, al des-cristalizar ese pasado van
a poder avanzar, liberarse, como decís y avanzar hacia algo más luminoso. Esto,
al menos es algo. Debéis aprovechar ese momento en que la conciencia se abre
hacia los sufrimientos del pasado, para llevar a esos seres a su Divinidad
esencial en ese momento. No se libera el peso llevándolo hacia el presente. Se libera
el peso encontrando lo que aligera. El peso y la pesadumbre forman parte del
pasado. La ligereza forma parte de vuestro futuro, así como el recuerdo más lejano
que tengáis del origen de vuestra alma y la esencia que sois, que es el Amor. A
partir del momento en que hay apertura de conciencia, incluso si es en relación
a un fenómeno que pertenece al pasado y a un sufrimiento, en el momento preciso
en que hay apertura de conciencia a través de la manifestación de la emoción, existe
la posibilidad en ese instante y únicamente en ese instante, de hacer
desplazarse la Divinidad del hombre.
Y hay un
elemento esencial que es como un disparador que consiste en trabajar en una
zona “gatillo” de forma que se desencadene esa manifestación emocional que, es
la toma de conciencia de un pasado que fue ocultado, para evitar que este se
vuelva a cristalizar más tarde, en el cuerpo físico y desgraciadamente,
propicie la aparición de una enfermedad muy grave. Conviene, en ese momento
preciso en que hay revelación de la conciencia, revelación de la emoción en la
conciencia en relación a este sufrimiento del pasado, transformar esta toma de
conciencia de emoción por Amor. Esto requiere una técnica energética muy
precisa que consiste en conectar tu propio corazón con el corazón de aquél o
aquella que lo está viviendo y también con aquél o aquella que lo recibe (que
es el tercer término de la constelación, que no es aquél que está sometido a la
constelación sino el sujeto que es el revelador de la constelación).
Conviene
ponerle a él también, en contacto con su corazón de forma que comprenda que la
emoción que ha revelado, no es la suya y no puede cristalizarse en él a niveles
más profundos. Conviene, en el momento en que esta conciencia está abierta,
ponerla a nivel del corazón. Y esto es muy fácil, es suficiente pensar y es
suficiente ser uno mismo, como animador, en la dimensión del corazón y
transmitir esta dimensión del corazón a aquellos que participan. Y en ese caso
presente, que se hace posible según la cualidad del animador, de poder en ese
momento preciso y no en un tiempo disuelto, no en un futuro ni en otro momento,
poder derivar esta energía emocional hacia la energía del corazón. He dicho.
Pregunta:
¿en la toma de contacto con el corazón hay precauciones a tomar?
La precaución
esencial consiste, antes de comenzar ese ejercicio, como de comenzar cualquier
acto en vuestra vida, dedicar un gesto de bendición, de gratitud al Cielo y a
la Tierra que se podría llamar también una conexión al Cielo y una conexión a
la Tierra. Tenéis que conectaros
conscientemente con vuestra Fuente Padre/Sol y con vuestra Fuente Madre/Tierra
de forma que estéis alineados y que favorezca la fluidez de la Unidad y la híper
sincronicidad que ocurre en esos momentos en que estáis alineados con vuestras
Fuentes. Acordaros que sois Amor y que sois Fuente igual que la Fuente Sol y
que la Fuente Madre. Y si en el momento de ese trabajo de constelaciones o en
cualquier otro momento del día, cuidáis y os concienciáis de vuestra alianza al
Cielo/Padre y a la Madre/Tierra, a vuestras propias Fuentes desdobladas,
ciertamente estáis en tercer término, en ese momento, no puede haber efectos
nefastos en las estructuras. Conviene entonces, para todas estas personas que
desean trabajar en la conciencia y liberar (incluso si es un error lo habéis
comprendido ahora) lo que está enquistado en ese pasado y que da la impresión
de tener frenos poderosos para la liberación (no del alma desafortunadamente,
sino del ego solamente), de estar alineado, de estar perfectamente en esa
verticalidad de conexión a la Fuente Sol y a la Fuente Tierra. En esas
condiciones, el trabajo de corazón a corazón se hace fácil. No puede haber
impacto e impregnación de energía de cristalización tanto en el animador que le
constela como en el revelador. He dicho.
Pregunta:
¿cómo saber si algo es “correcto” o no?
Querida alma,
todo lo que te aporta alegría y contento, todo lo que hace que te aproximes a
tu dimensión esencial y tu comprensión de la Fuente amante y justa, debe ser
continuado. Por el contrario, si hay una duda que te parece un freno a lo que
tú eres, a lo que expresas y a lo que sientes en lo más profundo de tu ser (que
no sale siempre al exterior porque hay frenos efectivamente, en este momento),
esta actividad sea la que sea, debe ser abandonada. Ahora, si una actividad sea
la que sea, si un encuentro sea el que sea, te pone en un estado que parece
acercarte a tu corazón y a tu esencia, ese encuentro, esa actividad debe ser
continuada evidentemente. Todo es cuestión de resonancia, de puesta en
resonancia y en afinidad. ¿Que sientes cuando haces esto o aquello? ¿Qué
sientes cuando encuentras a tal persona o tal otra? Si esto te aproxima a tu
corazón, en ese momento es correcto. Si te aleja de una manera u otra a través
de la manifestación de una incomodidad, esto no es correcto y debe ser
abandonado. Tú tienes en ti mismo, todos los elementos para percibir, sentir y
comprender esto. He dicho.
Pregunta:
¿cómo administrar los miedos?
Querida alma,
lo que tú expresas como miedo, corresponde a una carencia. Todo lo que expresa
la carencia y el miedo a la carencia induce automáticamente la manifestación de
carencia. Conviene en esta actitud mental, poner todo tu corazón a la obra y
decidir en función de las ideas, en función de la realidad y de la verdad, de
los acontecimientos que ocurren en la vida, lo que tú quieres y debes hacer en
función de lo que desean tú alma y tu corazón. En ese caso, el miedo y la
carencia estarán totalmente ausentes porque tú estarás en lo correcto. Y a
partir del momento en que hay corrección, hay justa retribución. En ningún
caso, desde el momento en que la vía elegida es la correcta, puede haber miedo
o carencia porque tú eres Amor y el Amor es abundancia y el Amor es expansión,
el Amor es alegría y no placer. He dicho.
Pregunta:
¿cómo alcanzar ese estado de alegría, ese estado de Amor?
Queridas almas,
lo que os voy a proponer hacer al final de nuestra reunión, es facilitar el
acceso a la dimensión de la Fuente Corazón para hacer vivir en vosotros esta
experiencia y poder reproducirla en vosotros en cada momento de vuestro aliento
de vida. Esto no puede hacerse mediante palabras. Esto no puede hacerse
mediante un lenguaje porque está más allá de las palabras y del lenguaje sino
en el aspecto vibración, en el aspecto conciencia pura, despojado de toda
atadura a las referencias pasadas y despojado de toda atadura a cualquier
juicio o apreciación sino simplemente en la experiencia del instante.
Pregunta:
¿cómo hacer para conectarse corazón a corazón con el otro sin resistencias?
Querida alma,
las resistencias que sientes no son a causa de tu alma, evidentemente, sino a
causa de tu ego, a causa de tu personalidad que tiene miedo de soltar
totalmente la presa que tiene miedo de dejar hacer. Ahora la dimensión del
corazón requiere necesariamente lo que vosotros llamáis un abandono, un soltar
presa, o todavía mejor un dejar hacer. Hace falta efectivamente, estar vencido
para dejar al Amor salir de sí. Estar vencido requiere deponer las armas es
decir, deponer el ego y abandonarse en cuerpo y alma en esta dimensión en la
que no hay más espacio para el miedo ni para la carencia ni para la
personalidad. Estas son palabras pero es un acto energético de apertura total:
lo que haremos si lo deseáis al final de esta sesión. No hay una técnica
propiamente dicha para llegar a esto, solo hay la experiencia en un momento
dado que libera totalmente en relación a vuestros miedos, en relación a vuestras
carencias y en relación al ego. No es necesario vencer al ego, lo que sería una
nueva manifestación del ego, sino que es cuestión de que la vibración del alma
impregne plenamente la totalidad de quién eres. He dicho.
Pregunta:
¿puedo llamar a mis “Guías” durante las curas que doy?
Evidentemente
hay un momento en que entras en contacto, en que te aproximas a la Fuente que
eres. Te pones en resonancia, ciertamente, con algunas entidades de Luz
auténtica que están presentes únicamente en esos momentos. Incluso se pide,
querida alma, estar así lo más a menudo posible en tu vida de todos los días y
en cada minuto de tu vida en esta dimensión. Lo que tú llamas tu “trabajo” es
de hecho una condición de servicio y no olvides que ese servicio debe también,
y con prioridad, servirte a ti mismo. Conviene en cada minuto de tu vida
ponerte en ese estado vibratorio propicio al reencuentro. En el momento en que
estés en terapia, conviene ponerte a tu servicio de forma que esas presencias
se manifiesten, porque a partir del momento en que entres en contacto con esos
seres de Luz auténtica que te acompañan, independientemente de los periodos de
cura, vas a comprender que no puede haber lugar para el vacío, para el miedo y
para la carencia en ti. ¿Por qué simplemente actuar o ponerse en conexión o
aproximarse en todo caso, a su Fuente únicamente en el momento de servir a
otros? ¿Por qué no estar en esas condiciones en cada instante de tu vida para
servirte a tí mismo, en cada instante de tu vida? Es importante estar en esa
dimensión para sí mismo antes de estarlo para otros. Y esto puedes hacerlo en
cada minuto, en cada respiración, instantáneamente, incluso fuera de tu lugar
de trabajo. Todo esto no es más que un condicionamiento que has puesto, un
condicionamiento más, que hace que aceptes o te juzgues digno de recibir estas
presencias de Luz auténtica únicamente en el momento en que practicas tus
curas. Pero se te pide evidentemente, aceptar y reconocer que tú estás en la
gratitud en cada minuto de tu vida y que tienes el derecho y el deber incluso,
de establecer ese contacto fuera de tu trabajo, sea para tí mismo, para tu vida
afectiva y para tu vida social. He dicho.
Gracias a
vosotros queridas almas. Y quisiera, antes de comenzar el trabajo, hacer un
pequeño aparte ahora sobre lo que se desvela a medida que pasan los días en
este planeta. Desde hace varios meses, hemos hablado mucho de la Madre del
agua. El agua efectivamente es un elemento esencial que es el soporte de la
vida. Como Madre de las aguas, os he anunciado ya, desde hace muchos meses,
acontecimientos que deben sobrevenir a título de comprensión para el ser humano
pero que son también el resultado de errores ligados al agua que se han hecho
un poco por todas partes en este planeta: la negación del poder del agua a
través de su rol fecundador y fecundante. Conviene hoy, tomar la medida de lo
que está a punto de ocurrir para comprender que lo que veis como exterior a
vosotros, como alejado de vosotros, como que no os concierne, como que no os
alcanza, ocurre también, evidentemente en vuestro interior.
Hay una
revolución del agua. Hay una reorganización o un ensayo de reorganización del
agua interior, de vuestra fluidez interior. No olvidéis que el agua representa
la memoria de las vidas, de la vida. En vosotros está esa remoción de agua y
por lo tanto, de memorias. Lo que veis en el exterior, aparentemente lejano,
ese exceso de agua asociado al elemento aire, ocurre exactamente, de igual
forma y de manera sincrónica en vosotros. Y las subidas emocionales que están
ligadas a los miedos a la tristeza, que están asociadas al agua y al aire, y
para Francia al fuego (es decir de alguna forma al elemento cólera) que se ven
exteriormente, son también manifestaciones interiores.
La falta de
agua corresponde a la insuficiencia, no de miedo, sino a la insuficiencia de
estabilidad de Francia. Todo lo que observáis en el exterior puede ser
reportado a vuestro interior. Y hoy, a través de las manifestaciones de los
elementos externos, comprendéis los elementos interiores que se manifiestan en
vuestra vida en función de lo que sois en vuestro esquema evolutivo. Es muy
importante, extremadamente útil comprender lo que ocurre en el exterior,
incluso muy lejos, como reflejo de lo que ocurre en vuestro interior y
comprender que lo que se manifiesta en vuestra vida, a la Luz de lo que ocurre
en el exterior, y que aparentemente no parece concerniros y que os concierne
por tanto al más alto plano. Ahí se encuentra una vía de comprensión,
ciertamente mental pero de asimilación de lo que sois y hacia qué tendéis y
debéis ir en función de las manifestaciones, ciertamente desagradables y
ciertamente trágicas, que han comenzado estas últimas semanas con un poco de
retraso en relación a lo que dijo Miguel, y no obstante muy presente en vuestro
planeta desgraciadamente, pero afortunadamente para vuestra mayor felicidad y
vuestra mayor apertura y para vuestro gran aprendizaje de Luz. He dicho.
Si os parece
bien, ahora vamos a pasar a este trabajo eminentemente práctico en el silencio
del corazón. Os pido simplemente, conscientemente, dirigiros al Sol y pensar en
ese Sol como Fuente de Luz y establecer un contacto por lo alto de vuestra
cabeza con esa Fuente magnífica que es vuestro Sol físico. De igual forma,
pensar en vuestras plantas de los pies e imaginar el núcleo de nuestra querida Madre
Tierra, ese cristal Fuente que está en el centro del planeta, un inmenso
cristal vibrante y palpitante. Y bajo vuestras plantas de los pies, vais a
entrar en contacto con esa Fuente vibrante y palpitante, la Fuente Madre y la
Fuente Padre, en lo alto. Y ahora, vamos a revelar el Amor que sois. Y vuestra
conciencia se lleva al corazón, en el medio del pecho, no el corazón físico
sino el corazón espiritual, el corazón Divino. Y dejáis esta energía, esta
conciencia que gana vuestro pecho agrandarse, como una sombra que se propaga.
Así, mis
queridos hijos amados, os agradezco que seáis lo que sois y os doy las gracias
por haberme permitido manifestarme con vosotros. Os amo y os aporto mi
bendición para que continuéis siendo la Fuente que sois. Estad seguros de mi
amor y del amor del Padre porque sois Amor. Yo os bendigo.
Original en Francés: www.autresdimensions.com
Traducción: Susana Milan
http://mensajes-del-espiritu.blogspot.com
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