Original en francés.
http://www.autresdimensions.com
Canalizado: Jean Luc Ayoun
Transcripción: Véronique Loriot
Traducción: Susana Milan
http://mensajes-del-espiritu.blogspot.com
http://mensajes-del-espiritu-2010.blogspot.com
audio cortesía de Alicia Botero Toro http://hallegadolaluz.blogspot.com
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HERMANO K
31 marzo 2012
Yo soy HERMANO K. Hermanos y
Hermanas, os presento mis respetos y os ofrezco mi Amor. El sentido de mi
venida hoy, se inscribe, de alguna forma, en la prolongación de todo lo que he
podido decir desde hace algún tiempo, relativo tanto a la experiencia de mi
acceso al Absoluto, inicial, como al conjunto de elementos que os he
comunicado, referentes tanto al eje ATRACCIÓN/VISIÓN como a la Libertad, la
Autonomía, la Responsabilidad. Dada la presencia de la Onda de Vida, vamos a
intentar juntos, no de daros otros conceptos u otros elementos sino más bien,
intentar captar lo que representan estos conceptos (más allá de cualquier
explicación) llevados por la Onda de Vida, llevados por la Gracia y, si es
posible, haceros penetrar todavía más, y pasar esta Puerta Estrecha. Pasar,
como he dicho, de lo conocido a lo Desconocido, pasar a esa otra Orilla.
Se os han comunicado muchos
elementos, desde hace unos meses. Lo habéis notado quizá, que van en el mismo
sentido y tienden a una uniformidad que está en resonancia directa con nuestra
presencia entre vosotros y en vosotros, por el hecho mismo del nacimiento de lo
que se ha llamado Onda de Vida u Onda de la Gracia o Don de la Gracia. Lo que
os propongo entonces, es un mantenimiento. Este mantenimiento supera
ampliamente una simple explicación, un simple profundizar pero más bien, es una
puesta en evidencia de una lógica, una puesta en evidencia de la certeza de la
Unidad y del Absoluto. Y por eso, permaneceremos en los términos que he tenido
el placer de mostraros. Esos términos están limitados. Son las palabras
Atracción, Visión, Libertad, Autonomía, Responsabilidad, entre otras. Porque es
totalmente posible, cualquiera que sea la presencia de la Onda de Vida hoy, en
el desarrollo mismo de vuestra vida más ordinaria y más simple, entender lo que
representan estas palabras, más allá de su sentido común. Por supuesto, la
Libertad por ejemplo, representará siempre, para un ser humano en la carne,
algo que se busca. En efecto, raros son los humanos que desearían estar
encerrados y rechazarían la libertad. Pero una vez más ¿de qué libertad se
habla? ¿Es la libertad de aquél que está en prisión y la libertad de
desplazarse de un muro a otro? O ¿es la Libertad de aquél que no conoce ninguna
prisión, ningún límite a sus pasos, ningún límite a su propia Conciencia?
Esos mantenimientos se inscriben
también, en un mecanismo particular llamado en la tradición del Advaita
Vedanta, Satsang, es decir la capacidad de llevar ante la conciencia los
elementos a resolver para, precisamente, más allá de lo intelectual y de la
mente y del aspecto reflexivo, alcanzar el sentido primero de la palabra. Y por
tanto, es una llamada para transcender la palabra misma, ir más allá de lo que
es conocido, para ir hacia lo desconocido de la palabra, más allá de la
actividad mental. Así pues, os propongo comenzar desde hoy, esto. En efecto, el
conjunto de lo que se os debía dar, comunicar, lo ha sido y lo hemos dicho.
Queda hoy, si lo aceptáis, transformar esta última Verdad, esta única Verdad,
esta gracia y este Éxtasis. Que es, os lo recuerdo, totalmente independiente de
cualquier creencia, de cualquier certeza, de toda suposición, de toda historia
y de cualquier linealidad. Este es el principio mismo de la transcendencia.
Intentaremos juntos, en la medida también de invitar, con mis palabras y con
vuestra escucha a que aparezca la Onda de Vida. Podrá parecer que algunos
elementos se repiten, no es así. Previamente a mi respuesta, a una cuestión
dada, dejaré unos instantes a fin de que instalemos en cada uno de nosotros, la
Onda de Vida como una participación, una Comunión más allá de cualquier
comunión, permitiendo también progresar, si es posible, hacia más Simplicidad,
hacia la Autenticidad más Humildad. Alcanzar de alguna forma, ese indecible,
mucho más allá de las palabras pronunciadas. Os invito pues, a inaugurar esto.
Quedémonos, si os parece bien, en las palabras que he pronunciado o que en todo
caso, giran en torno a estas nociones y a esta vivencia.
Nos escuchamos unos a otros.
Pregunta: ¿qué pasa cuando las
personas azuzan a otro y le hacen mal?
Solo hay verdugo y víctima en una
concepción dual, donde se expresa precisamente, el principio inexorable
inscrito en la dualidad, llamado Bien y Mal. Creer (o suponer) que el Bien solo
trae el Bien o que el Mal trae el Mal, es totalmente absurdo. Tenéis ante los
ojos, cada día, Hermanos y Hermanas que cultivan el Mal, que aplican el Mal y
recogen una forma de Bien, como ventajas, dinero, como retribución. No existe
nada más absurdo que el Bien y el Mal. Porque el Bien y el Mal está siempre
inscrito en una referencia conocida. Que esta referencia conocida se llame
sociedad, regla civil o regla moral, no vienen la espontaneidad del ser sino de
un condicionamiento, de una acción y de una reacción de la que nadie conoce el
inicio y no conocerá el fin. A nivel espiritual se ha llamado libre albedrío,
el sentimiento de que cada uno es responsable de sus actos y que recogerá
precisamente, lo que ha sembrado. Nada es más falso. El mundo del karma
pertenece a la personalidad. El mundo de la Gracia pertenece al Absoluto.
Querer pues, dilucidar lo que le ocurre a una persona en la dualidad, puede ser
considerado como satisfactorio para la mente pero no podrá liberar al ser que
está sometido, que sufre o que se aprovecha. Porque la acción y la reacción se
inscriben de manera perpetua, en la acción y la reacción. No puede existir fin
a la acción y a la reacción. Incluso las enseñanzas cuyo eje es la observación
de la acción-reacción, incluso han acabado por negar la acción-reacción, como
posibilidad de que termine y no exista más. La acción-reacción es pues,
perpetua. No es infinita, lo único infinito por supuesto, es la acción de
gracia, la Libertad y no el libre albedrío. El libre albedrío es una visión
personal, inscrita en la personalidad e inscrita en definitiva, en el Bien y el
Mal.
Para el Absoluto no existe ni Bien
ni Mal, porque el Bien y el Mal solo son las consecuencias de la dualidad, de
la ley del karma y jamás la ley de karma puede acabarse. Además, los seres que
han vivido, no el despertar al Sí sino que se han transformado en Liberados
vivientes, han denunciado todos, la no realidad del libre albedrío, la no
realidad de la libre elección. Creer que hay una elección es propio del ego.
Creer que actuando de tal forma, se van a liberar ciertos sufrimientos, es
propio del ego. Obviamente, este mundo en sí mismo, demanda siempre una
solución en ese mundo. Pero ¿qué solución queréis encontrar? ¿La que os
mantiene en este mundo? ¿O la que os da la Paz y la Eternidad? No pueden ser
las dos, indiscutiblemente. Así, querer buscar por qué tal persona vive el Mal
o por qué tal otra persona vive el Bien, solo refuerza la ilusión del libre
albedrío y os mantiene en los condicionamientos. El Absoluto no conoce
ningún condicionamiento. Es verdadera Libertad y Libertad total, no se inscribe
jamás en el libre albedrío, que es indiscutiblemente, repito, del dominio de la
personalidad y no de la Unidad. Y aun menos del Absoluto.
Esto os llama a un re-posicionamiento.
La víctima tiene necesidad de su verdugo. El verdugo tiene necesidad de su
víctima. Poco importan las razones, porque las razones están inscritas en una
continuidad lógica de acciones-reacciones, que no tienen nada de lógica, sino
que mantienen la apariencia de una coherencia, la apariencia de una posibilidad
de solución, lo que por supuesto, es estrictamente imposible. Lo que digo os
impulsa a cambiar de mirada, a cambiar de posicionamiento, a no consideraros
más ni como víctima, ni como verdugo, ni como salvador sino más bien, a superar
y transcender todas esas condiciones a fin justamente, de no estar más
condicionado y sobre todo, no ser más condicionante para los seres que
frecuentáis, que enseñáis, que educáis de los que tenéis a cargo. Porque el
hombre sometido a la dualidad va a educar. Ahora, la educación es todo salvo
Libertad. La educación es precisamente, hacer entrar en un molde, hacer entrar
en un mecanismo de funcionamiento, ya sea esta educación, de la escuela o
incluso una educación llamada espiritual. Os mantiene de manera inexorable, en
la dualidad, en el Bien y el Mal, haciendo que busquéis un bien, para huir de
un mal, sin poder salir jamás. Esta es la trampa resultante para la Conciencia.
¿Queréis vivir la trampa? ¿Queréis vivir la Libertad? Os corresponde decidir.
La preparación incluso de vuestra mente, debe de la manera más evidente
posible, llevaros a salir de este auto-condicionamiento, de esta ley de
acción-reacción. Ese cambio de posicionamiento no es una negación de la acción-reacción,
sino el acceso a algo diferente cuyos efectos son reales, palpables. Os
corresponde decidir, como siempre. Lo que os reafirma en lo limitado, será
siempre el condicionamiento. La Libertad no conoce ningún condicionamiento.
Pregunta: ¿poner la atención en la
Onda de Vida permite desarrollarla?
No. Permitiría hacerla más
consciente pero ciertamente no desarrollarla. Tomar conciencia de un mecanismo,
sea el que sea, en este mundo y esta dualidad, es totalmente otra cosa.
Mientras que no atraigáis vuestra atención sobre la posición de vuestro pie, no
tenéis conciencia de vuestro pie. Hay pues un cambio de atención y un cambio de
polaridad. Llevar la atención o la conciencia a una zona del cuerpo, más allá
de lo que se ha denominado Estrellas o Puertas, y más precisamente ahora, sobre
la Onda de Vida, es una primera etapa que está llamada a ser reemplazada muy
rápido, por la ausencia de identificación con el observador, con el testigo,
sino a volverse uno mismo, lo que era previamente observado e identificado.
La Onda de Vida no tiene que ver con vuestra voluntad. La Onda de Vida no tiene
que ver con vuestra presencia en una Conciencia, sea la que sea, sea Turiya,
sea la del soñar, la del sueño o de la conciencia ordinaria, puesto que el
Absoluto y la Onda de Vida solo son los testimonios de ellos mismos y de nada
conocido y nada sistematizable, para vosotros en este mundo. Es un momento en
que es necesario pasar del observador, del que observa esto, al que no es ya
esto, sino que se convierte en lo observado. Pasar pues, de alguna forma, del
“yo soy” (o del Sí) a “Yo soy Esto” (o al no Sí). No hay otra forma de salir
del marco, más que conociendo ese marco y, de alguna forma, entendiendo,
después de haber entendido, que no hay ninguna existencia propia, exceptuada
precisamente en los marcos que han sido definidos por vosotros o por el
conjunto de las conciencias llamadas “humanidad”. Los pueblos nativos hablan
por eso, del tiempo del sueño y consideran con razón, que todas las vías que
tomamos en este marco de la dualidad, no es más que un sueño del que hará falta
salir un día. Y para salir del sueño, es necesario efectivamente, saber que
soñáis. Esto remite también a la Caverna de Platón, esto remite por supuesto a
Maya, esto remite inexorablemente a la noción de Transcendencia, de muerte y de
vida. Después de haber sido el observador o el testigo, entendéis que no hay ni
observador ni testigo, ni observación, ni observado. En ese momento, os hacéis
el conjunto de proposiciones, sin excluir ninguna. Ahí está el Absoluto: “Yo
soy esto”. No hay una especie de discontinuidad total, entre esta Orilla y la
otra Orilla. Una discontinuidad total entre el Bien y el Mal, y el Absoluto.
Necesitáis efectivamente, pasar de la posición del observador (o testigo) a la
ausencia total de observación. Ahora, la observación no es posible más que a
través de la Conciencia. En el sentido de que el Absoluto no es una Conciencia.
Para que haya observación, hace falta que haya en alguna parte, proyección de
la Conciencia en un límite, e identificación con ese límite.
Pregunta: ¿sentir simplemente la
Onda de Vida, permite precisamente identificarse con ella?
La identificación requiere un
proceso, repito, de proyección. La Onda de Vida es vuestra naturaleza y nuestra
naturaleza, nuestra esencia, nuestro aspecto inmanente y transcendente que es
la Totalidad llamada Parabrahman, mucho más allá de la Unidad, más allá de todo
principio. Esto vuelve a recalcar que no existe ni mundo, ni persona, ni
objeto, ni sujeto. El sentir es de la observación. Lo que se produce,
independientemente de vuestra propia participación. Y evidentemente, el momento
donde incluso esto se suelta, es el momento en que no podéis ya sentir, en
verdad, ni ignorar tampoco. Esta identificación última, hace de vosotros el
Absoluto. El Absoluto que, por el cambio de posición, más allá de cualquier
Conciencia, os saca de todo límite, de toda limitación, de todo encierro, de
toda condición y sobre todo, de toda persona. Sea que seáis el conjunto de las
personas, sea que no seáis ninguna. Pero no sois más esta persona. Aun menos
este individuo. Aunque haya persistencia de una forma, aunque haya persistencia
de una persona y de un individuo, no sois más ese individuo y esta persona.
Igual que no sois específicamente otra persona ni otro individuo. Pero sois la
suma (y no solamente la suma) de todos los individuos, de todas las personas.
Acordaros: no podéis definir el Absoluto. No podéis más que aprehender, después
refutar lo que es efímero. El Absoluto no puede jamás, ser efímero. Así pues,
la vida misma inscrita entre el nacimiento y la muerte, no puede ser la Verdad.
Es una creencia. Desde el punto de vista del que vive este cuerpo, es certeza y
verdad y más allá, la única verdad verificada por la ley de acción-reacción. Pero
para el Absoluto esto es todo salvo una prueba, sino más bien una negación del
Absoluto. Vosotros sois lo que Sois desde la Eternidad, antes de tomar un
cuerpo y antes de dejar un cuerpo o después.
Vivir la Conciencia de esto, es
vivir la Onda de Vida. Abandonar esto, es hacerse la Onda de Vida, no como un
nacimiento aunque efectivamente, os hablamos de renacimiento o de Resurrección,
es más bien un acto fundador de Último. El mecanismo no es intelectual ni
siquiera mental, sino que es un mecanismo transcendental donde de un golpe, de
uno solo, después de algunas experiencias más o menos largas, más o menos
intensas, os instaláis en el Absoluto. No como una creencia, sino como la única
evidencia de que cualquiera que sea el devenir de este cuerpo, cualquiera que
sea el devenir de este mundo, cualquiera que sea el devenir de todas las
Dimensiones, del conjunto de las Conciencias y del conjunto de presencias,
vosotros seguís siendo para siempre, ese Absoluto. No existe ningún puente para
llevaros de lo conocido a lo desconocido, de esta Orilla a la otra Orilla. Solo
la desaparición total de esta Orilla, os transporta por Transcendencia a la
Verdad. No hay más concepto, no hay más precepto, no hay más idea, no hay más
pensamiento, no hay más sentido del “yo soy”. No hay más Presencia. No hay por
cierto, más Conciencia. La Onda de Vida (testigo y marcador del nacimiento de
esto) es inexorable (como se os ha dicho) e irreversible, en este tiempo de la
Tierra, si tal es vuestro deseo. Y vuestro deseo está ahí, más allá de
cualquier voluntad, desde el instante en que la Onda de Vida está instalada a
nivel de los dos primeros chakras. Habéis vencido la muerte, habéis vencido el
nacimiento, habéis vencido la Ilusión pero no es un combate. Es, de alguna
forma, un relajamiento total de lo que vosotros pensáis mantener o detener. No
hay nada que pedir. Sobre todo no hay nada que vencer. Solamente hay
que ser eso porque vosotros sois eso.
Pregunta: ¿cómo saber si la Onda de
vida ha alcanzado los dos primeros chakras?
Por las percepciones, localmente, a
nivel de lo que se denomina el peristaltismo del perineo, que se hace de manera
automática. Esta oscilación de contracción-dilatación, esa bocanada asimilable
a un éxtasis o gozo sexual intenso pero que no depende de ninguna causa, de
ninguna persona, de cualquier cosa que de ella misma. En ese momento, el
Absoluto se convierte en el orden de lo posible. Se hace vuestra Verdad, la
sola y única. Es por eso que se produce de manera más natural, en los momentos
en que estáis tendidos, en los momentos en que estáis relajados, en los
momentos en que dormís, por las noches (de manera preferente, pero no sólo).
Porque es en esos momentos, en esta posición tendida (que es a la inversa de la
posición de pié), en esas noches (que son la inversa de vuestros días), en ese
espacio donde no puede existir otra cosa que un sueño, donde la mente no tiene
presa, donde las emociones no tienen presa (porque no estáis ya presentes en
vosotros mismos, en el ego), cuando puede concretarse para vosotros. Y sin
embargo eso, ha estado siempre ahí.
Pregunta: ¿vivir experiencias
sensuales, en sueños, tiene una relación con la Onda de Vida?
Totalmente, transcendiendo todos los
tabús, todos los condicionamientos, toda noción de personalidad, toda noción de
posesión. Esto está relacionado con vosotros mismos, con cualquier proyección,
con cualquier ser. Es por eso que todas las religiones, sin ninguna excepción,
todas las tradiciones, han ocultado esta noción de sensualidad. Yo no quiero
decir con esto que el acto sexual lleve a la gracia pero innegablemente, como
he dicho, procede de la misma naturaleza, de la misma vida, más allá de
la vida. Pero por eso, es necesario que todo el peso del pecado, todo el peso
de lo prohibido, en relación con la muerte, el nacimiento y la sexualidad haya
sido antes, totalmente transcendida, no por una ascesis sino más bien, por la
Luz Vibral misma, habiendo invertido las energías de los dos primeros chakras,
por el despertar de una de las Coronas Radiantes o, os lo recuerdo, la Luz
Adamantina, la Radiación del Ultravioleta y del Espíritu Santo han venido a
transmutar, en parte, la acción de las energías que encarnan del primer y
segundo chakra, privados de la supervivencia. Innegablemente, hay una relación
(más que formal y más que fuerte) entre esos sueños o esas manifestaciones que
yo calificaría de pseudo sexuales, porque es el mismo misterio. Lo que explica
por cierto, que todos los tabús y las prohibiciones, todos los deseos, todas
las perversiones como todas las felicidades, giren, para la mayoría de la
humanidad en torno a esto. Pero desviados, alterados, amputados. Encontrar el
androginia primordial, encontrar la bipolaridad más allá de los sexos, forma
parte por supuesto, de la concreción o de la revelación de lo que siempre
ha estado ahí, es decir la Onda de Vida. Es el momento en que el Cielo desposa
a la Tierra y donde la Tierra desposa al Cielo. Por supuesto es un Matrimonio,
es una Unión. Es esta Unión, al contrario del matrimonio humano, es donde la
sexualidad humana es transcendente. Ella libera de todo marco, de todo
encierro, de toda relación y de toda condición. Este Éxtasis es realmente
nuestra naturaleza, la naturaleza misma de la vida, la Esencia misma de la
vida, en toda Dimensión, sin ninguna excepción. La violencia, el Bien y el Mal,
la muerte y el nacimiento, no son en definitiva, más que la negación de este
Éxtasis. No sirve de nada buscar los fundamentos o los actos fundadores de esta
negación, porque esto sería darle peso, aunque en un momento dado, os hemos
transmitido las explicaciones sobre la naturaleza de la Sombra y la naturaleza
de la Luz, sobre la naturaleza misma de la falsificación y de los datos
históricos. Hoy, no es que esto sea ya verdad, o menos verdad, sino que es
transcendido simplemente, por la Onda de Vida misma y por la propia Tierra.
Más allá de este mundo, en todas las
Dimensiones hay Fusión, hay Comunión, hay Disolución, hay deslocalización y
multilocalización que evidentemente, la personalidad va a poder llamar
sexualidad. Pero que obviamente, no tiene estrictamente nada que ver con un
acto sexual, aunque se haya vivido así, puesto que hay transcendencia real de
la carne. Tanto si se vive en Êtreté, como en esta carne, se realiza sin la
carne, naturalmente. Por supuesto, estando encarnados algunos pueden realizarlo
en la carne, ya que de todas formas, han logrado transcender el tabú último de
la humanidad, a través precisamente, del nacimiento, la muerte, la procreación
y la sexualidad. Algunos seres llamados “Maestros”, en el siglo veinte y mucho
antes, han tratado, por pequeños toques, de informaros sobre esto. Mientras que
la personalidad se agarre, seguirá habiendo sexualidad pero no se convertirá
jamás en la Onda de Vida. La sexualidad sagrada no es un acto sexual, es un
acto de Unión mística entre dos polaridades Interiores del Ser, como cualquier
ser reencontrando otra Conciencia, sin referencia a una polaridad sexual. Dicho
de otra forma, en otras Dimensiones, pasáis la vida, la Eternidad, como un
semblante de lo efímero, comulgando en el Éxtasis. Más cerca de vosotros, en
esta Tierra, existen mamíferos marinos, viviendo en 3ª Dimensión pero Unificada
(son Guardianes de la Tierra) y como por azar, su única actividad más allá del
alimento, es el juego del amor en todas sus formas. Esto es inconcebible para
el ser humano, por el propio hecho del encierro, o las reglas mismas de esta
carne, los condicionamientos de esta carne, a través de las edades, a través de
diferentes etapas de la vida que no permiten realizar esto.
Pregunta: ¿la Onda de Vida está
llamada a subir más alto que el chakra cardiaco?
Sí. Ella evoluciona por todas
partes. En las enseñanzas más allá del budismo sagrado inicial, la Onda de Vida
sube de debajo de los pies, de la tierra, resurge a nivel del Sahasrara o séptimo
chakra, para surgir como Vajra. Y de ahí, más allá, viene el nombre de
Vairayana. De la Unión, como se ha llamado ya, de la Prakriti y Purusha: la
unión de los complementarios y opuestos. Pero el objetivo no es solamente salir
por la cabeza, no solamente instalarse en el Corazón, sino más bien, realizar
la alquimia Última que conduce al Absoluto, que sea con esta forma, sin esta
forma llamada cuerpo. Pero esto no tendrá definitivamente ninguna importancia,
ya que aquél que está instalado en su naturaleza, en el Parabrahman, sabe
que este cuerpo es ilusorio y efímero. No lo rechaza, no lo condena pero
sabe que desaparecerá sin ninguna aprensión, sin ninguna angustia, sin ningún
duelo. La Creación, como lo in-creado, o como la a-creación es en definitiva,
un acto sagrado. Este acto es, ante todo, un acto de interpenetración rebajado
a nivel de lo humano, en tanto que sexualidad.
Pregunta: ¿cuando se vive la
Libertad puede expresarse rechazando establecerse en el Absoluto?
Sí, porque sois enteramente Libres.
Y esta Libertad no es un rechazo. El Absoluto no será jamás un objetivo ni una
etapa. Es la Verdad. Pero reconocer la Verdad, vivir la Verdad, no pasa
necesaria y obligatoriamente, por la desaparición terminal o final de toda
individualidad. Vosotros sois lo que sois antes de nacer, o después de morir. Y
esto está presente desde toda la Eternidad, desde todo tiempo y desde toda
especie, desde toda Dimensión. Vosotros sois eso.
No tenemos más cuestiones. Os damos
las gracias.
Hermanos y Hermanas, agradezco
nuestros diálogos. Os propongo (y nos propongo) compartir la gracia. Os digo
hasta pronto, en el Amor y en la Verdad. Juntos, compartamos.
…Participación del Don de la gracia…
HERMANO K os ama porque sois Amor.